que la comisión de la causa de beatificación nuestra Fundadora logre la investigación de una biografía histórica de la Madre Hedwige Portalet para continuar con su causa y promuevan la exposición del patrimonio estructural y espiritual de la Congregación en la Casa Madre y en cada provincia;
que las comisiones de: Misión, Formación y Comunicación promuevan la interiorización y recreación del carisma;
que se promueva la utilización de las técnicas de información y comunicación que permitan compartir las experiencias y recursos a nivel de todas nuestras obras en el mundo (web, facebook,Twitter, blog…)
2. Para la Comisión organizadora del Jubileo y las Prioras provinciales, prioras, superioras y responsables de obras.
Las Prioras provinciales, prioras, superioras, formadoras y directoras/rectoras ayuden en su trabajo a las comisiones del Jubileo y cuiden que todas las actividades de esta celebración se realicen dentro del marco de los objetivos del Jubileo y de las prioridades del sexenio del Proyecto de la Congregación.
La celebración del Jubileo durante los próximos tres años significa, sobre todo, penetrar en un proceso dinámico de renovación (misión, vida espiritual, vida común, obras) y no sólo la celebración de acontecimientos, sino tiempos de retornar a Dios, de quien recibimos el don de nuestra vocación de dominicas de la Inmaculada; y hacia aquellos a quienes somos enviadas.
El recuerdo de nuestra historia dentro de las celebraciones jubilares no tiene por objetivo la auto- glorificación, sino recordarnos, en actitud agradecida, nuestros orígenes y ayudarnos a redescubrir la valentía de nuestro compromiso de ser luz para el mundo.
La celebración del Jubileo es una oportunidad para que, con espíritu abierto, renovemos nuestro compromiso a ejemplo de nuestra fundadora en actitud cercana y compasiva con los olvidados, los pobres, víctimas de la violencia y la opresión. A todos aquellos que viven en la ceguera y en la soledad.
La celebración del Jubileo debe reflejar la CREATIVIDAD a través de las artes (poesía, pintura, etc.) y las modernas redes de comunicación (internet, YouTube, twitter, entre otros.) como medios de predicación y de hacer luz en el corazón del hombre como lo hizo Hedwige con los ciegos.
La celebración del Jubileo escuche y capte la voz y la imaginación de los jóvenes, invitándolos a participar en nuestra misión de evangelización.
Que sea un tiempo para vivirlo como familia DIC, afianzando la identidad y el sentido de pertenencia. Las hermanas de la Congregación, las comunidades de misión, los grupos de laicos y todas las personas, que de una u otra manera, son afines a nuestra familia, están llamados a participar en este tiempo de gracia. Que todas las acciones que se realicen habitualmente en la Congregación se hagan a la luz de este acontecimiento.
Que las celebraciones tengan las características de: sencillez y sobriedad, alegría, esperanza y gratitud como expresión de la vida de Madre Hedwige. En ambiente gozoso y testimoniante que invite a participar de este Carisma a nuevas vocaciones.
Que el fruto de las reflexiones, conclusiones, aportes y sugerencias durante este tiempo de gracia servirán para la elaboración del Proyecto de Formación General de la Congregación.